La UMSL es muy grande, para que os hagais una idea la universidad tiene dos paradas de metro. Yo me baje en una a voleo y acerte. Muy a muy pesar, la mayoria de los alumnos (y alumnas) del curso al que acudi curso estan entrados en anyos y en kilos, pero la clase estuvo entretenida y repetire.
Tras eso, metro de nuevo para atravesar la ciudad y llegar al estadio, donde me esperaban Peter y un amigo para ir al beisbol.
Curioso deporte este. A pesar de ser un juego al que muchos hemos jugado de pequenyos aporreando el balon con el brazo, no os podeis imaginar lo pesado que es un partido entero. En muchas ocasiones pasa un rato bastante largo sin que haya una carrera completa, e incluso a veces cuesta ver que bateen en condiciones. Por fortuna, fui a ver un partido bastante entretenido a ratos y disfrute bastante.
Pero al igual que en el futbol americano, lo del deporte alli en el estadio es una cosa mas. Alli la gente acude a ponerse hasta arriba de comida, a charlar, a comprar en las tiendas e incluso a tomarse un cafe en las mesas de los pasillos dando la espalda completamente al juego. Aqui el sistema de pedir es muy peliculero, eso que todos hemos visto alguna vez en la gran pantalla. El tio con la cesta acuestas va escaleras arriba y abajo ofreciendo perritos, cervezas, cocacolas e incluso (ojo al dato) a veces van con un palo de dos metros del que cuelgan hileras de algodon de azucar. Si amigos, this is america.
Pero lo mejor viene a la hora de pedir. Imaginemos la situacion. Estas en el medio de una grada, con 10 asientos a tu derecha y 10 a la izquierda. Moveverte hasta el tio de los perritos supondria un incomodo importante para esas personas. Solucion? le pides lo que sea, y el se lo pasa al primero de la fila, que a su vez lo va pasando hasta que te llega hasta a ti. Luego, claro, va el dinero. y luego, el cambio. Todo eso pasa por las manos de los amigables espectadores que te lo pasan sin poner ni una mala cara, ni decir ni una palabra...Hay cosas que deberiamos importar ya mismo...
Tras el partido, dimos una vuelta al San Luis nocturno y vimos lo bonita que se pone esta ciudad ante la sorpresa de todos, incluido un Peter que hacia bastante que no frecuentaba esos lares a horas intempestivas.
El jueves dio paso al viernes, y con ello al fin de semana. Un buen fin de semana, bastante tranquilo, en el que fui sali un poquillo sin excesos, y en el que al fin pude jugar al futbol el domingo con unos profesores del colegio. El futbol, si, un deporte de los de verdad.
oh...qbonito!
ResponderEliminarpor cierto, este finde hacemos lo del corto! a ver q tal salee!!
Hola primo, pues mira que bien lo de la comida, pero eso aquí en España no lo podemos importar y lo sabes, probablemente el dinero (y tampoco la comida) jamás llegaría a su destinatario. Si allí eso ocurriera, supongo que lo solucionarían a tiros, aquí nos lo tomaríamos casi con normalidad, jeje.
ResponderEliminarComo te dice Alba, ayer estrenamos el corto y la verdad es que fue genial, salimos muy contentos, ya te contaré detalles. Un abrazote